¿Qué motiva a que la gerente general de Bagó Bolivia esté tan involucrada en la gestión de la sustentabilidad? ¿Por qué es clave que la alta gerencia de una empresa esté involucrada con estos temas?

“En primer lugar, el rol que juega un gerente general en la estrategia de sustentabilidad es decisivo porque es el responsable de llevar a la empresa a cumplir sus objetivos. No tendría el mismo resultado en términos de impacto y alcance si el tema solo fuera conducido por la gerencia de sustentabilidad o las demás áreas. El gerente general tiene la responsabilidad de alinear el negocio y su rentabilidad con los valores de la sustentabilidad.
En segundo lugar, yo estoy convencida de que la rentabilidad no es el único fin de una empresa, sino más bien es un medio. Una empresa debe lograr su sostenibilidad económica, sin dudas, pero es importante que esa rentabilidad se consiga de una manera responsable con la comunidad y el medio ambiente. Todos los esfuerzos que realicemos para impulsar el desarrollo sostenible de nuestras comunidades finalmente repercutirán en el éxito de nuestra empresa y su rentabilidad”.

 ¿Cómo se definió la estrategia de sostenibilidad de Bagó Bolivia y por qué se estableció la prioridad ambiental en esta estrategia?

“La responsabilidad social empresarial como tal la veníamos aplicando desde hace más de 40 años, desde el inicio de operaciones de la planta en Bolivia cuando alineamos nuestros procesos productivos a los estándares de sostenibilidad. El primer objetivo fue lograr operaciones con bajo impacto ambiental y climático. En un primer momento, la meta fue lograr un bajo impacto en uso del recurso “Agua” y su tratamiento posterior, ya que en este punto estaba nuestro mayor impacto ambiental. Luego, continuamos con la medición de contaminación acústica de la planta, es decir medimos los ruidos generados por las operaciones para minimizar su impacto. Y finalmente, controlamos y medimos los vapores que emiten los calderos. Nuestro proceso inició con mediciones iniciales de estos impactos, y luego lo formalizamos contratando una empresa en 2017 para medir nuestra huella de carbono y la huella hídrica de nuestras operaciones. A partir de estas mediciones lanzamos nuestra “Estrategia de reducción de Huellas” con acciones planificadas hasta el año 2025.
En general, nuestra estrategia aborda las tres dimensiones de la sustentabilidad, no sólo la ambiental, sino también la social y económica. Pero por nuestros impactos, decidimos hacer énfasis en la estrategia ambiental debido a la urgencia de las soluciones para enfrentar el cambio climático. Nuestro razonamiento en ese momento era el siguiente: no podemos ser una empresa que aporta a la salud de los bolivianos al tiempo que contaminamos el medio ambiente del país, con los impactos perjudiciales en su salud.

La medición de nuestras huellas en 2017 nos permitió evidenciar el real impacto de nuestras operaciones y diseñar una estrategia de mitigación y adaptación. Si bien en Bolivia hay ciertas experiencias en bonos de carbono no están formalizadas por lo que no eran una opción viable para nuestra estrategia de mitigación y adaptación. Optamos por apoyar el diseño de infraestructura urbana sostenible, como plazas y espacios verdes, para aportar con vegetación en ciudades como La Paz que tienen baja cobertura verde. Junto con la municipalidad de la ciudad de La Paz, apoyamos el programa de “Adopta una Plaza” que implica mantener la vegetación de estos espacios y utilizar el agua tratada de nuestros procesos productivos para el riego.

Como segunda estrategia, apoyamos la Plataforma Ambiental Piensa Verde para aportar a la conservación de nuestros bosques y áreas protegidas, como la Chiquitanía boliviana. Apoyamos a través de la creación de un fondo y dinero invertido en proyectos de conservación en Bolivia.

Finalmente, como tercer acción, apoyamos el  Proyecto de la Huella DAKAR, que calculó las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) generadas por las actividades realizadas alrededor de la competencia Rally Dakar en su paso por Bolivia. Este proyecto tuvo alcance nacional y por ello nos interesó porque superaba nuestras acciones en La Paz. El objetivo era compensar con acciones puntuales las emisiones generadas por el DAKAR. El primer año instalamos paneles solares para un hospital en el altiplano y al siguiente año fueron cocinas solares.

Bagó Bolivia lidera la mesa ambiental del Pacto Global Bolivia, ¿qué acciones se lideran desde esta red?

Desde 2018, lideramos la mesa N° 1 sobre clima, energía, suelo y agua del Pacto Global, junto a Coca-Cola Company. Nos comprometimos a trabajar diseñando planes y proyectos conjuntos con otras organizaciones, en el marco de programas de RSE. Nuestro aporte a la mesa parte de responsabilizar a dos personas de Bagó Bolivia para llevar a cabo las acciones de la mesa, Linda Ramirez y Lucía Flores, una de ellas especialista ambiental.

Liderar esta mesa es un logro para nuestra empresa, pero por sobre todo es un logro personal porque materializa nuestros esfuerzos y nos permite tener mayor alcance de nuestras iniciativas”.

¿Cuán importante es la transparencia para un laboratorio en Bolivia?

“Muy importante. Laboratorios Bagó es la primera organización en Bolivia y del sector farmacéutico en publicar un Informe con los Estándares GRI. Bajo el lema, de que todo lo que se mide se puede mejorar, iniciamos este proceso de reporte como una herramienta de medición y gestión. Queríamos demostrar que si bien Bolivia es un país chico puede ser líder en buenas prácticas empresarias. Y en estos momentos, la transparencia es crítica para una sociedad como la boliviana. Este año estamos avanzando en alinear nuestra estrategia a los Objetivos de Desarrollo Sostenible y aplicar la Guía SDG Compass del Pacto Global. Hemos detectado 9 ODS en los que tenemos mayor impacto, y ahora estamos definiendo estrategias”.

¿Cómo enfrenta laboratorios Bagó Bolivia el contexto de pandemia?

“Nosotros abordamos la pandemia desde dos escenarios, el primero es el interno con nuestros empleados. Mantenemos la producción para responder a la demanda, al tiempo que garantizamos la seguridad y salud de nuestros empleados. Solo mantenemos las operaciones de la planta, nuestro personal administrativo está cumpliendo tareas desde sus casas.

El segundo escenario es externo. En alianza con Farmacorp, formamos y capacitamos a médicos en respuestas de emergencias. Por otro lado, proporcionamos a periodistas unos kit de bioseguridad antes de la cuarentena, como medida preventiva para estos profesionales. Ahora seguimos apoyando con insumos como barbijos a centros médicos vulnerables. Estamos convencidos que la prevención es la mejor herramienta para combatir esta pandemia. Una acción clave es la comunicación y sensibilización, y estamos poniendo todos nuestros esfuerzos en nuestros canales para impulsar la prevención”.