SAP Social Sabbatical es la cartera de programas globales de consultoría gratuitos que permiten a los empleados de SAP compartir sus conocimientos, habilidades y experiencia con organizaciones sin fines de lucro y empresas sociales de todo el mundo. A través del mismo, los colaboradores, dedican sus habilidades y conocimientos profesionales a las organizaciones por unas semanas, de esta manera, buscan fortalecer sus competencias de liderazgo. Actualmente, el programa ya ha colaborado con 453 organizaciones en el mundo.

Luego de dos años de pandemia, el programa volvió a tener un encuentro presencial y Argentina fue sede para su primer encuentro global, trabajando con cuatros organizaciones locales: Nilus, Tekuoia, Unplastify y redActivos.

En esta oportunidad, como parte de este relanzamiento, Hemang Desai, director global del programa SAP Social Sabbatical, estuvo en el país y, en una entrevista con ComunciarSe, brindó más detalles sobre esta iniciativa.

¿Cómo nació el programa SAP Social Sabbatical?

Oficialmente el programa nació en 2012, pero fue desarrollado dentro de SAP como resultado de un trabajo que hicimos en Haití, en 2010, donde notamos el potencial de llevar las habilidades profesionales de los empleados corporativos a los líderes de estas organizaciones. Allí vimos el poder de complementar estas organizaciones con esas habilidades y lo que se puede hacer desde una perspectiva de crecimiento y escala. Ahí nació. Luego hicimos una prueba piloto en 2012, donde 30 empleados fueron a tres países diferentes, trabajando con diferentes clientes. Y a partir de ahí ha crecido con el tiempo, hasta la pandemia.

¿Por qué eligieron Argentina como sede del primer encuentro SoSa global post Covid?

Analizamos diferentes factores en lo que respecta a la selección de la ubicación. Por un lado, Argentina es un mercado muy importante para nosotros y es país que ha estado muy cerca desde el punto de vista de la responsabilidad social empresarial, tenemos varios programas que se ejecutan localmente y excelentes empleados que han trabajado en numerosas iniciativas. Además, tenemos una gran oficina que nos apoya mientras llevamos a cabo el programa. El apoyo sobre el terreno es fundamental. El otro elemento que consideramos es el apoyo de nuestro socio Pyxera Global. Ellos han estado con nosotros desde 2012 y ​​tienen una gerente regional para América Latina que vive en Buenos Aires. Así, añadimos su experiencia, que fue otro factor importante.

Por otro lado, analizamos todo lo relacionado con la seguridad y la protección, es decir, los casos de COVID y las hospitalizaciones. En este punto, Argentina también tiene un sistema de salud bastante bueno. Conisderamos todos esos factores y, por supuesto, también los requisitos de entrada y salida, con respecto a las cuarentenas.

¿Cómo es el proceso de selección para las organizaciones participantes?

Hemos desarrollado lo que llamamos un proceso de alcance y selección. Comenzamos cuatro meses antes revisando qué tipos de asociaciones tenemos. Analizamos qué organizaciones conocemos dentro de nuestra red; qué organizaciones aceleran el conocimiento global, por qué hacen este tipo de trabajo, no solo con SAP, sino también con muchas otras empresas.

Por otro lado, miramos a otros socios intermediarios, por ejemplo, somos socios del Foro Mundial de Empresas Sociales, que es una organización global que reúne a las empresas sociales de todo el mundo o la asociación Agora, que trabaja en América Latina con empresas sociales. También nos comunicamos con nuestros socios y vemos si tienen recomendaciones para nosotros.

Entonces, adoptamos una especie de enfoque híbrido para nuestra red. Las ONG o los clientes anfitriones, como los llamamos, se postulan al programa. A partir de ahí, podemos sumergirnos en la selección. Nos aseguramos que puedan participar en las fechas planeadas; y que tengan una necesidad comercial sólida para los propósitos del proyecto. Si cumplen los requisitos y son efectivas desde una perspectiva de alineación estratégica para nosotros, entonces podemos preseleccionarlas y finalmente hacer la selección.

¿Cómo funcionan los equipos de trabajo?

Es un equipo global muy diverso, por ejemplo, el equipo que vino a Argentina son 11 personas de siete países diferentes que van a pasar cuatro semanas trabajando en sus proyectos. Así que son equipos con más de siete culturas diferentes. Además, analizamos cuánto tiempo han estado en SAP y la carrera de cada uno. Consideramos una serie de esos factores como qué tipo de función desempeñan y qué tipos de habilidades tienen y creamos un equipo completo en términos de los conjuntos de habilidades y experiencias que tienen, así estamos en posición de enfrentar cualquier desafío que los clientes nos propongan. Entonces, ya sea que nos soliciten la medición del impacto, la gestión de datos o un programa de estrategia o un programa de marketing, tendremos las habilidades adecuadas dentro del equipo.

Ese es realmente el objetivo, construir cada uno de estos equipos, para que podamos tener las habilidades adecuadas para los proyectos, mientras que la diversidad realmente desafía y empuja a los empleados a convertirse en líderes globalmente fluidos o líderes con mentalidad global, ya que también es uno de nuestros mejores programas de desarrollo de liderazgo.

Desde tu opinión, ¿Cuáles son los principales desafíos sociales en América Latina?

Existen todos los desafíos que hay en todas partes. Cuando piensas en la pobreza, en educación, inequidades alimentarias y en el cambio climático, son desafíos en todas partes, pero lo que tratamos es mirar y preguntarnos ¿a qué lugares podemos ir para encontrar socios que estén marcando una diferencia tangible para abordar estos desafíos? Eso encontramos en Argentina, y específicamente en Buenos Aires, con los cuatro socios que pudimos seleccionar, porque vemos a los emprendedores sociales -como estas cuatro organizaciones- como la respuesta para resolver algunos de esos grandes desafíos.

Otro tema importante fue la pandemia, ¿Cómo afectó el Covid-19 este programa? ¿Qué nuevos desafíos encontraron?

Los últimos dos años han sido difíciles para todos. En el caso de Social Sabbatical, siempre ha sido un programa muy inmersivo, donde el poder está en juntar a las personas. Así, el desafío que tuvimos, cuando comenzó la pandemia, fue decidir si hacíamos el programa quitándole su lado inmersivo o si lo poníamos en pausa y lo retomaríamos cuando pase la pandemia; y elegimos la última opción, porque sentimos que el poder de este programa es la experiencia personal. Mientras, seguíamos ejecutando algunos programas locales en los que emparejamos a empleados locales con organizaciones locales.

Por otro lado, aprovechamos esta oportunidad para crear nuevos programas dentro del espacio pro bono global. Así establecimos programas virtuales. Tenemos un programa centrado en la equidad racial; otro sobre causas de justicia social pro bono para la equidad económica, que llevamos a cabo en cuatro continentes el año pasado. Además, con la participación de más de 140 colegas de SAP, también hemos lanzado un programa flexible y altamente escalable llamado “El colectivo de aceleración”, que es un programa que ayuda a conectar a los empleados con las empresas sociales en una llamada y se pude participar durante una hora, ya sea dando algunos consejos o haciendo un proyecto pro bono completo.

Entonces, tomamos los recursos e invertimos en desarrollar nuestras capacidades en el espacio pro bono virtual. A futuro no se van a reemplazar, sino que ambos tienen su lugar y sus beneficios. Por lo tanto, tendremos el programa Social Sabatical, que seguirá siendo esta experiencia inmersiva presencial, y luego tendremos trabajo virtual flexible para oportunidades pro bono.

Por último, ¿Cuáles son los objetivos para este 2022?

Queremos continuar demostrando que realmente se puede innovar y ejecutar programas pro bono, tanto de manera presencial como virtual, creando esa buena combinación para nuestros empleados, para que puedan participar como quieran.

Específicamente para Social Sabbatical queremos volverlo escalable, ya que antes de la pandemia teníamos tres o cuatro tipos diferentes programas dentro de Social Sabatical: teníamos el global, un programa local y un programa ejecutivo regional.  Estábamos manejando alrededor de 17 a 20 equipos con la participación de entre 200-250 empleados.  Ahora no vamos a volver rápidamente a esos números, pero estamos analizando cómo comenzamos a construir esa estructura de nuevo para volver a escalar el programa. Ese es realmente el objetivo para los próximos meses y hasta 2023. Sabemos lo importante que es para los empleados de SAP participar en estos programas y queremos asegurarnos que podemos apoyar a nuestros socios, como organizaciones sin fines de lucro y empresas sociales. Por lo tanto, ahora tenemos un plan para traer el programa realmente de vuelta.