Para la ONU la Agenda 2030 ha perdido el rumbo
El informe “Dando forma a las tendencias de nuestro tiempo” encuentra que a cinco años de su puesta en marcha, el progreso de los ODS “está fuera de curso” e incluso puede haber sido revertido por la crisis del COVID-19.
Cinco “megatendencias” creadas por el hombre seguirán dominando y frustrando los esfuerzos globales para poner al mundo en un camino más sostenible y próspero, a menos que se tomen ahora intervenciones políticas urgentes para influir en ellas, advirtió hoy la Red de Economistas de la ONU en un nuevo informe.
Los economistas en jefe del sistema de las Naciones Unidas identificaron conjuntamente las cinco “megatendencias” que darán forma a nuestro mundo a lo largo de este siglo. Si su impacto es positivo o negativo en general, dependerá de las políticas implementadas hoy, dicen los autores del informe.
1- el cambio climático y la degradación de la naturaleza;
2- las desigualdades;
3- la urbanización;
4- los rápidos cambios de población;
5- la revolución tecnológica.
El informe, “Dando forma a las tendencias de nuestro tiempo”, encuentra que cinco años después de la implementación de la Agenda de Desarrollo Sostenible, el progreso ya está fuera de curso y, en muchos casos, incluso puede haber sido revertido por la crisis del COVID-19. Los compromisos políticos no se han traducido en acciones políticas.
Las finanzas sostenibles están aumentando, pero ni lo suficientemente rápido ni a la escala necesaria. "El cambio en nuestro comportamiento y mentalidad aún no coincide con nuestras ambiciones de desarrollo sostenible”.
Publicado en vísperas de la 75ª Asamblea General de las Naciones Unidas, el informe de la Red de Economistas de las Naciones Unidas pide una nueva forma holística de diseñar políticas para los próximos 75 años. Aboga por una mayor cooperación en áreas aparentemente no relacionadas, como la digitalización, la planificación urbana y la producción de energía, que según estos expertos se abordan con demasiada frecuencia de forma aislada.
Sin una revisión de la actual formulación de políticas inconexa, el logro de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, los objetivos globales de 15 años para mejorar la vida de las personas en todas partes, “es muy poco probable”, según el informe.
“Estas megatendencias ya llevan décadas y no se pueden deshacer o cambiar fácilmente de manera significativa en el corto plazo. Pero son el resultado de la actividad humana y, por lo tanto, pueden moldearse con el tiempo mediante políticas coherentes ”, afirma Liu Zhenmin, jefe del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU que dirigió la preparación del informe.
Por ejemplo, décadas de políticas sostenidas y específicas han contribuido a uno de los mayores cambios en megatendencias de la historia: los cambios drásticos en la población mundial. Desde el pico del 2% en la década de 1960, el crecimiento anual promedio de la población mundial se ha desacelerado al 1% en la actualidad y se espera que cese por completo para fines de siglo. La disminución asociada en las tasas de fertilidad puede apoyar una mayor igualdad de género, ya que las mujeres pasan menos de sus vidas en funciones de procrear y cuidar niños. Por otro lado, el rápido envejecimiento de la población genera preocupaciones sobre las limitaciones a la innovación, la productividad y el dinamismo macroeconómico.
“Debido a que cada megatendencia también afecta a las otras megatendencias, las intervenciones de políticas en un área pueden generar impactos positivos y que se refuerzan mutuamente en otra”, agregó Zhenmin.
Por ejemplo, la urbanización reúne todos los factores necesarios para la innovación tecnológica y las ganancias de productividad. Y aunque los centros urbanos generan la mayoría de las emisiones globales de gases de efecto invernadero y cerca de la mitad de todos los residuos, una planificación y un control adecuados pueden superar los daños al medio ambiente y contribuir a la equidad y la sostenibilidad.
La innovación tecnológica y la digitalización, por ejemplo, han acentuado claramente las desigualdades de ingresos, especialmente en la época del aprendizaje en línea y el trabajo a distancia. Y el cambio climático puede reforzar la migración rural-urbana al desplazar a cientos de millones de personas de las zonas costeras y de las tierras afectadas por la sequía.
Las megatendencias generan efectos adversos debido a las deficiencias o a los rotundos fracasos de las políticas. En el futuro, las Naciones Unidas pueden facilitar la formulación de respuestas a las megatendencias de forma que se fomente la creación de consensos políticos internos sobre la adopción de medidas sostenibles. De ese modo, las Naciones Unidas pueden ayudar a movilizar la asistencia mundial necesaria para los distintos países, especialmente aquellos con menos recursos.
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