Guy Ryder envía un mensaje a las empresas en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. A continuación lo reproducimos.

El trabajo decente no puede existir en un ambiente de violencia. El trabajo decente para todos, meta ampliamente adoptada e incluida en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, significa que las mujeres y los hombres han de poder trabajar en condiciones de libertad, dignidad y seguridad.

La protección contra la violencia de género en el trabajo – y contra todas las formas de violencia – es una cuestión de derechos y de bienestar, pero también una cuestión de eficiencia. Las mujeres suelen ser desproporcionadamente afectadas por la violencia en el entorno laboral. Y esta violencia sirve de sustento a la desigualdad y, por consiguiente, socava el potencial de desarrollo de todas las personas. Mientras sigan existiendo la violencia de género y la desigualdad de género, será difícil hacer realidad los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

El problema de la violencia de género se ha incluido entre los temas de la Iniciativa sobre las Mujeres en el Trabajo impulsada en el marco de la celebración del Centenario de la OIT. En 2016, la OIT convocará una reunión de expertos que en representación de los trabajadores, los empleadores y los gobiernos examinará la cuestión de la violencia en el mundo del trabajo, en la perspectiva de sentar las bases para la acción futura de la OIT en este ámbito.

Hoy, instamos a todos los actores del mundo del trabajo a unir fuerzas para hacer frente a la cultura de la discriminación que permite que la violencia siga existiendo en el lugar de trabajo, para remediar las circunstancias que hacen que las mujeres sean especialmente perjudicadas y para tomar medidas a fin de erradicar el problema. Tenemos los medios para lograrlo: en particular, el diálogo social, los convenios colectivos y los marcos legales, así como la recopilación sistemática de estadísticas desagregadas por sexo sobre la incidencia de la violencia en el mundo del trabajo.

Aprovechemos todos los recursos que tenemos a nuestra disposición y utilicémoslos con eficacia, pues ya es más que hora de desterrar la violencia contra las mujeres en el lugar de trabajo.