Cambio Climático y biodiversidad, dos retos del sector privado

09.08.2011 | América Latina

Durante la mañana se desarrollaron dos sesiones paralelas sobre Cambio Climático y Biodiversidad. Debatieron sobre el valor económico de los servicios de los ecosistemas, miradas tan diversas como las de Manoel Silva da Cunha, presidente del Consejo Nacional de los Pueblos Extractores (CNS) y Rodolfo Witzig Gutilla, Director de Asuntos Corporativos de Natura. La mesa sobre cambio Climático conto con la presencia de Izabella Mônica Vieira Teixeira, Ministra de Medio Ambiente de Brasil.


Witzig Gutilla de Natura compartió la estrategia de biodiversidad de la empresa, integrando productos basados en la naturaleza en su cartera de productos.  “Queremos que los consumidores  se sientan cerca de la tierra cuando usan nuestros productos”.

Al mismo tiempo, el ejecutivo de la empresa de cosméticos reclamó políticas públicas que fijen un ordenamiento sobre la biodiversidad y su uso económico.

Con una postura distinta el representante de los productores amazónicos dijo que “quien vive en el ambiente y no del  ambiente tiene otra mirada sobre el valor económico de la biodiversidad. Silva reclamó que  los programas de financiación estén muy focalizados en los centros urbanos y no llegan a los pequeños productores locales”.

Minutos antes, Claudio Maretti de de WWF Brasil reclamó incluir el valor de la biodiversidad en la cuenta del PBI de los países  y entre los activos de las empresas.

Durante la sesión,  Helena Pavese, Gerente de política ambiental de Conservación  Internacional (CI-Brasil) anunció que está trabajando en una medición TEEB específica para el sector de negocios de Brasil.

Pavese destaco que en los últimos años se ha duplicado y triplicado la demanda de productos certificados como alimentos orgánicos, cacao, café, pescados y bosques.

La mesa sobre cambio Climático contó con la presencia de Izabella Mônica Vieira Teixeira, Ministra de Medio Ambiente de Brasil.

La funcionaria celebro que en la próxima Conferencia de Río+20 por primera vez el sector privado va a tener un rol protagónico en las negociaciones.  Definió como insuficientes las metas ambientales fijadas por la ONU en 1992 y que se imponía generar un nuevo marco global, pero advirtió que “Río+20 no cuestionará el legado de 1992, sino que mirará al futuro”.

A  su turno, Luiz Pinguelli Rosa, representante del Fórum Brasileiro de Mudanças Climáticas se refirió a los cambios necesarios para evitar el cambio climático y sostuvo que iniciativas como las del auto eléctrico serán inútiles si no se cambia la matriz energética basada en el carbón y en el gas. “El cambio climático es el único problema realmente global e inclusivo que tiene el mundo. Impacta en pobres y ricos”, añadió.

David Canassa, Gerente Corporativo de Sustentabilidad de Votorantim Industrial describió el panorama de las emisiones de carbono en Brasil y afirmo que el país “no es tan eficiente como a veces se cree. Cada brasileño emite 9 toneladas de carbono al año y el país es responsable del 4% de las emisiones globales”.

Canassa cree que la meta de reducción de 36% para 2020 está solo focalizada en deforestación y que faltan acciones más precisas para el sector industrial.

Planteó la necesidad de monitorear las emisiones, penalizar económicamente a los que excedan sus cuotas y normalizar un sistema legal que está muy atomizado.

(La realización de la cobertura de este evento contó con el apoyo de Natura Cosméticos y LAN)