El Consejo de Administración de Lanbide ha dado luz verde al conjunto de ayudas y subvenciones que permitirán la financiación de esta fórmula especial de trabajo protegido, a la que se acogieron 86 empresas de la comunidad autónoma en 2012.

Mediante la subvención de los costes salariales (317,96 euros al mes de media), el pasado año este tipo de ayudas posibilitó el mantenimiento de 7.717 puestos de trabajo y la creación de 72 nuevos empleos en 8 centros especiales.

En la misma reunión, el organismo dependiente del Departamento de Empleo y Políticas Sociales ha aprobado el presupuesto de 8 millones de euros para las ayudas a la creación y sostenimiento de las empresas de inserción, sociedades mercantiles o sociedades cooperativas cuyo objeto social es la integración y formación sociolaboral de personas en situación de exclusión social como tránsito al empleo ordinario.

La Orden que regula las ayudas a este tipo de empresas (Orden de 4 de mayo de 2009) contiene dos líneas de subvención: una destinada a apoyar la creación de empresas de inserción mediante la financiación de estudios de mercado relativos a su viabilidad, y otra destinada al sostenimiento de las empresas ya creadas, que incluye tanto ayudas a la financiación de inversiones en activos fijos, estudios de mercado y auditorias, como ayudas más directamente relacionadas con la creación y el mantenimiento de puesto de trabajo.

Las empresas de inserción contratan a estas personas durante un ciclo de tres años, a lo largo de los cuales se les enseña una profesión hasta que se puedan insertar laboralmente en el mercado ordinario. Aunque las circunstancias pueden variar de una empresa a otra y de una persona a otra, dependiendo de su situación, unas 3 ó 4 personas suelen pasar de promedio por el mismo puesto durante el periodo subvencionado (3 años).

En 2012 existían 594 puestos subvencionados en el conjunto de empresas de inserción. De ellos, 485 eran puestos ocupados por personas en proceso de inserción, de las que 308 eran mujeres (63,5%). Estas personas que vivían en situaciones de exclusión social se encuentran en la actualidad contratadas por empresas de inserción creadas por asociaciones sin ánimo de lucro cuyo objetivo es ofrecer al ciudadano en dificultades, una segunda oportunidad.

El Consejo de administración de Lanbide también ha acordado la asignación de recursos económicos para financiar las ayudas para la conciliación de la vida laboral y familiar, a cuya partida destinará 1,96 millones de euros en 2013. Con este presupuesto se prevé atender un total de 2.075 solicitudes.

Esta línea de ayudas trata de fomentar la igualdad de oportunidades de empleo entre hombres y mujeres. En concreto, el programa subvenciona la sustitución de trabajadores que se acogen a excedencia o reducción de jornada por cuidado de hijos o familiares dependientes.

Según los datos del año pasado, la franja de edad entre 25 y 45 años es donde existe un mayor número de contratos (73,35%), los de menores de 25 representan el 15,23%, y los de mayores de 45 años, el 11,42%.

La mayor parte de las empresas participantes se dedican al comercio al por mayor y por menor (24%), a actividades sanitarias y servicios sociales (28%), y a educación (10%). El 84,35% de las personas contratadas bajo estas modalidades son mujeres. 

Una última línea de ayudas aprobada por Lanbide busca apoyar a la persona emprendedora y estimular el crecimiento y la creación de empleo. Lo hace mediante el abono de las cuotas a la Seguridad Social a las personas perceptoras de la prestación por desempleo que hacen uso del derecho al cobro de la misma en su modalidad de pago único.Para facilitar el acceso al autoempleo Lanbide destinará un total de 500.000 euros en 2013.

El real decreto ley 4/2013, de 22 de febrero, ha incorporado a dos nuevos colectivos entre las personas beneficiarias de la capitalización del 100% de la prestación por desempleo. Por un lado, las personas jóvenes, hombres hasta 30 años y mujeres hasta 35, que se constituyan como trabajadores o trabajadoras autónomas, y las personas menores de 30 cuando destinen su importe a realizar una aportación al capital social de una entidad mercantil de nueva constitución o constituida en el plazo máximo de doce meses anteriores a la aportación.