El impacto económico de la pérdida de la biodiversidad

15.06.2011 | Gestión

La degradación y la pérdida de la Biodiversidad y los Servicios Ambientales ganaron la atención de los negocios en los últimos años. Sin embargo, mientras que algunas empresas líderes entienden claramente los retos, un número considerable de empresas que operan en sectores ambientalmente sensibles, tales como extractivas, la construcción, la agroindustria y las finanzas, no parecen tener este asunto en su radar. En una de las conclusiones del estudio “The Nature of Ecosystem Service Risks for Business” realizado por la auditora KPMG, junto a Fauna & Flora Internacional (FFI) y la Iniciativa Financiera del  Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente  (UNEP FI) que analiza la medida en que las empresas están preparadas para hacer frente a los desafíos.


No todos los sectores están mostrando un nivel de madurez en la temática acorde con los riesgos de su nivel de dependencia de los servicios económicos que brindan los ecosistemas. 

Hasta el momento, las empresas siempre vieron en sus impactos en los ecosistemas sólo riesgos asociados con la reputación. Una nueva mirada, inaugurada por el estudio The Economics of Ecosystem and Biodiversity (TEEB), puso en evidencia que los riesgos y pérdidas económicas pueden ser mayores.

British Petroleum debió afrontar grandes pérdidas luego del desastre ambiental del Golfo de México con un severo impacto en el ecosistema que perjudicó la pesca y el turismo. La minera Vedanta tuvo que desandar un desarrollo minero en la India de U$S 2,7 billones de dólares por su impacto en el ambiente y en los Derechos Humanos.

Existen industrias, como la farmacéutica, con altos niveles de dependencia de la diversidad genética en la naturaleza. Según el estudio, entre un 20% y un 25% de los U$S 640 billones de ingresos de las farmacéuticas provienen y dependen de recursos genéticos.

KPMG y UNEP señalan tres sectores vinculados con commodities como el del papel, alimentos y farmacéutico y analizan sus matrices de impactos y dependencias en relación con los ecosistemas. 

El trabajo identifica cinco riesgos asociados con biodiversidad: el reputacional, el regulatorio, el legal, el operacional y el sistémico.

La investigación ilustra posibles planes de acción citando buenas prácticas empresarias en marcha.

Se menciona el caso de la empresa de helados Haagen Dazs que lanzó una campaña para alertar sobre la declinación de la polinización de las abejas y su impacto sobre la sustentabilidad en la producción de miel, unos de los ingredientes fundamentales de sus productos.

Otro de los ejemplos, es el de la cadena de supermercados británica Marks & Spencers que tiene un programa de selección de proveedores en productos clave (pescados, palma, algodón, madera y agua) donde se privilegian aquellos que tengan políticas de conservación de la biodiversidad. 

Acceda al trabajo completo en la Biblioteca de ComunicaRSE