La Confederación Sindical Internacional condena prácticas antisindicales de IKEA en EE UU
La Confederación Sindical Internacional (CSI), que representa a 175 millones de trabajadores y trabajadoras en 151 países y territorios, está alarmada por la tardanza del gigante del mueble IKEA en asumir su responsabilidad respecto a las prácticas de discriminación antisindical en Danville, Virginia, en EE.UU. Algunos de los 335 trabajadores de la planta de Virginia que trabajan para el grupo industrial Swedwood de IKEA están tratando de formar un sindicato, y otros trabajadores no pueden afiliarse al sindicato de su elección.
"Está claro que hay problemas en esta fábrica, que hace unos años fue abierta por la filial Swedwood de IKEA en Danville, Virginia, en EE.UU. IKEA está aprovechando la poca protección que ofrecen los EE.UU. a los trabajadores”, afirmó la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.
"No es demasiado pedir al gigante del mueble IKEA, que ha comunicado beneficios en torno a 3 mil millones de dólares y 31 mil millones de dólares de ventas, permitir que 335 trabajadores de una de sus fábricas tengan la oportunidad de conocer sus derechos y decidir por sí mismos. Simplemente estamos pidiendo a la empresa que abra sus puertas y permita que el sindicato tenga la oportunidad de enseñar a estos trabajadores cuáles son sus derechos, garantizados la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Si estos trabajadores desean ser representados por la International Association of Machinists and Aerospace Workers (IAM), la empresa debe negociar un convenio colectivo", agregó.
Según informa la CSI, existen problemas de seguridad en la fábrica. En respuesta a una denuncia presentada por el sindicato de maquinistas, la autoridad local de salud y seguridad consideró que Swedwood violaba la ley en varios aspectos. Los cambios resultantes y las multas por violación a las leyes de seguridad han ayudado a mejorar las condiciones en el interior de la fábrica. Sin embargo, se siguen produciendo lesiones graves. Los trabajadores han indicado que han sido despedidos sólo por haber mencionado que sería positivo afiliarse a un sindicato para proteger sus derechos. Swedwood ya llegó a un acuerdo con dos trabajadores que interpusieron demandas de incumplimiento por discriminación racial.