Según el informe anual “Panorama Laboral” de la OIT el desempleo urbano en 2012 fue del 6,4% lo que implicaría que el número total de desempleados se redujo en 400 mil personas. En 2011 la tasa había descendido a 6.8%. 

Por otro lado, la reducción del desempleo benefició a hombres y mujeres, aunque el desempleo de las mujeres sigue siendo 1,4 veces el de los hombres. Al tercer trimestre de 2012 el desempleo urbano de las mujeres era 7,7%, mientras el de los hombres llegaba a 5,6%.

Asimismo, el desempleo juvenil se mantiene alto y es un problema de carácter estructural. Equivale a 2,2 veces la tasa general, y casi 3 veces la de los adultos. El desempleo juvenil urbano es de 14,3% lo que equivale a unas 7 millones de personas una baja de 0,9 puntos porcentuales con respecto al mismo período del año pasado.

"La baja del desempleo abre una ventana de oportunidad, este es el momento para abordar los desafíos de la calidad de los empleos", dijo la Directora Regional de la OIT para América Latina y el Caribe, Elizabeth Tinoco, durante la presentación del informe en la capital mexicana. 

"Es hora de redoblar los esfuerzos para enfrentar la informalidad", agregó.En 2013 se prevé que esa tendencia se mantendrá y la tasa llegará a 6,2%. Son los niveles más bajos registrados desde que comenzó a utilizarse la actual serie estadística a principios de los años 90.

La OIT recordó que en 2002 esta tasa superaba el 11% pero a partir de 2004 comenzó a bajar, una tendencia que sólo fue ligeramente interrumpida durante la crisis internacional en 2009. Sin embargo la región experimentó una rápida recuperación y retomó el crecimiento con empleo. El dinamismo de las economías latinoamericanas y caribeñas, que han registrado un ciclo de crecimiento económico de varios años, ha sido determinante de acuerdo con el análisis del Panorama Laboral. Los promedios regionales anunciados en el informe fueron impulsados por una tasa de crecimiento económico de 3,1% en 2012, que se prevé se acelerará hasta 3,8% en 2013.

"Hay razones para ser optimistas aunque la región no debe descuidarse ya que la situación de crisis en otras partes del mundo genera una dosis importante de incertidumbre", dijo Tinoco.

Por otro lado llamó a aprovechar el momento para abordar los desafíos de la calidad del empleo, y recordó que el trabajo y los ingresos laborales constituyen un aporte fundamental para el crecimiento de las economías y la lucha contra la pobreza y la desigualdad.

"Casi la mitad de los trabajadores de la región sólo consiguen empleos informales, lo cual generalmente implica bajos salarios, poca estabilidad laboral, escasa cobertura de la seguridad social e incumplimiento de los derechos laborales", recordó Tinoco.

Destacó que otra asignatura pendiente de la mayor relevancia es la de mejorar la productividad de la región, que ha crecido menos que en otras partes del mundo, y de vincularla con el crecimiento de los salarios, pues esa es la manera de trasladar mayores ingresos a las personas y para lograr una mayor cohesión social.

"El crecimiento es indispensable pero no es suficiente. En la región tenemos problemas de carácter estructural que requieren de la adopción de medidas específicas para enfrentarlos, incluyendo los retos de igualdad de género y de empleo para nuestra juventud", recalcó la Directora Regional de la OIT."Es necesario colocar al empleo pleno y productivo y al trabajo decente como un objetivo político clave en el camino hacia el desarrollo", agregó Tinoco.