San Miguel y ProYungas lanzan programa de conservación y biodiversidad
En el marco del Programa Paisaje Productivo Protegido, ambas organizaciones se unen para proteger la flora y fauna de las Yungas tucumanas, ecosistema natural donde la compañía desarrolla su principal operación productiva.
San Miguel presenta junto a Fundación ProYungas, el Programa Paisaje Productivo Protegido que tiene por objetivo proteger los bosques nativos y la biodiversidad en las propiedades de la compañía con alto valor ecosistémico. Como corolario del trabajo conjunto que realizan ambas instituciones hace 3 años, la producción de fruta de San Miguel fue certificada como PRODUCTOYUNGAS, un sello que ratifica el origen de los productos en un contexto de Yungas, garantizando su preservación.
“En San Miguel somos conscientes de que cuidar nuestra tierra es cuidar el futuro. Con el Programa Paisaje Productivo Protegido estudiamos y preservamos los bosques nativos en nuestras fincas de Tucumán, haciendo un uso responsable del suelo y produciendo de un modo sustentable. Este es el compromiso que asumimos con la naturaleza y con las comunidades donde estamos presentes”, resume Lucas Méndez Trongé, Director de Relaciones Institucionales y Sustentabilidad de San Miguel.
San Miguel cuenta con 14.000 hectáreas propias en la provincia de Tucumán, distribuidas en tres fincas que se encuentran inmersas en las Yungas. Para integrar la producción con un modelo de conservación de la biodiversidad y los servicios del ecosistema, San Miguel trabaja desde hace 3 años junto a especialistas de Fundación ProYungas, que asisten a la compañía para garantizar una producción sustentable.
En una primera instancia, en el marco del programa se realizó un relevamiento para caracterizar el contexto ambiental y determinar pautas de manejo en función de las áreas de interés para la conservación y áreas con potencial productivo identificadas.
Luego se avanzó en el diseño e implementación de un Plan de Conservación de la Biodiversidad, a través del cual ProYungas instala periódicamente cámaras para el monitoreo de las especies silvestres en las áreas de bosque de San Miguel y analizar la interacción de los sistemas productivos con los ambientes naturales.
“Con San Miguel compartimos una misma visión: la producción en armonía con la preservación de la naturaleza. Trabajamos en conjunto para conocer y poner en valor este contexto ambiental”, explica Alejandro Brown, Director Ejecutivo de Fundación ProYungas.
Para compartir el fruto de los trabajos realizados, se creó un VISOR PAISAJE SUSTENTABLE SAN MIGUEL. Se trata de un mapa interactivo online, con tecnología Google, que permite acceder a información relevante en distintos formatos acerca de la flora y fauna que habita en las yungas ubicadas en las propiedades de San Miguel. El mismo está disponible para la comunidad educativa y público en general en http://paisajesustentable.sanmiguelglobal.com/
La más reciente de las iniciativas del programa está asociada a la creación de una reserva natural privada, la Reserva Natural Privada Caspinchango, para profundizar los mecanismos de conservación de la biodiversidad y promover beneficios ambientales, económicos y sociales para la comunidad.
En el relevamiento se identificaron al menos 200 especies de aves y 97 de mamíferos, se detectaron 6 especies en peligro de extinción, 20 especies de mamíferos y 12 especies de aves son nativas y la existencia de un stock de carbono de 199 Tn. por hectárea protegida.
El programa Paisaje Productivo Protegido promueve la incorporación voluntaria a procesos de certificación. A partir del 2017, San Miguel cuenta con la certificación “PRODUCTOYUNGAS”, un aval que garantiza un modelo productivo que convive con la biodiversidad de forma armónica. Se crean así las condiciones necesarias para que, lindante a las fincas, continúe creciendo un ecosistema vivo que ambas instituciones se comprometen a cuidar y preservar para las generaciones presentes y futuras.
“Estamos orgullosos del camino que estamos recorriendo. Promovemos el equilibrio de los recursos hídricos en el ecosistema, a la vez que aseguramos la sustentabilidad futura de la producción de la compañía. Estamos comprometidos a custodiar aquello que es germen de vida. Es una forma consciente de devolverle a la naturaleza lo que ella nos da”, concluye Méndez Trongé.
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