Consumers International (CI) está haciendo un llamado a las empresas a detener la promoción de alimentos con alto contenido de grasas, azúcar y sal, dirigida a la población infantil como parte de una estrategia para abordar esta crisis de salud pública. Este estudio internacional analizó las comidas que las tres principales cadenas de comida rápida del mundo, McDonald’s, Burger King y KFC, promocionan a los niños y las técnicas que utilizan para ello. El estudio arrojó que aunque estas cadenas han logrado avances en la reformulación de sus productos para reducir los niveles de grasas, azúcar y sal, siguen promocionando alimentos a los niños que aportan un porcentaje alto de la cantidad diaria recomendada (GDA, por sus siglas en inglés) para grasas, azúcar y sal. Las cadenas de comida rápida son un rasgo ya característico de las ciudades grandes y pequeñas de todo el mundo y sus marcas están entre las más reconocidas a nivel global. Sin embargo, están siendo criticadas por su contribución a los crecientes niveles de sobrepeso y obesidad.