Guía para empleadores sobre orientación sexual e identidad de género
La Embajada Británica en Chile, Fundación País Para Todos, y ACCIÓN (a través de su programa +Diversidad) presentaron el primer material en español para aprender a gestionar la diversidad sexual en el ámbito laboral.
Jasmine O'Connor, directora Internacional de Stonewall, presentó el material que encierra los objetivos, los desafíos y beneficios de trabajar con programas y materiales que clarifiquen la diversidad sexual en la empresa. "La equidad no es sólo importante en términos de derechos humanos, sino que también lo es para el negocio", sentenció.
Destacó que "aquellas organizaciones que reconocen la equidad y rechazan la discriminación en todos sus sentidos, ven valores agregados en su reputación y productividad, además de recibir diferentes perspectivas que aportan en la toma de decisiones."
Lo anterior, refrendado por estadísticas de la organización británica, que aseguran que "quienes se sienten incómodos en su ambiente laboral, ya sea por discriminación o por no actuar de forma auténtica, deben realizar un 12% extra de esfuerzo, en vez de dedicarse por completo al trabajo".
Como primer paso práctico laboral, O'Connor resaltó "la importancia de que las organizaciones presenten políticas claras de no discriminación y equidad con ejemplos que clarifiquen y sean entendibles en todos los niveles de jerarquía." Y fue enfática en señalar que "no hay forma de que las personas LGTB logren terminar con la discriminación de forma individual, todos los sectores deben actuar."
La actividad a la que asistieron cerca de 200 personas, entre representantes de empresas, organizaciones de la diversidad sexual, ONG, entre otros, contó con la presencia la Ministra del Trabajo, Javiera Blanco, quien recalcó que "como país, uno de los principales desafíos que tenemos es vincular con más fuerza el reconocimiento de la diversidad sexual como parte del trabajo decente, así como detectar adecuadamente y sancionar las formas de discriminación, exclusión y marginalización en el mundo del trabajo". Según ella, esto radica en que “el respeto de la diversidad es una decisión ética pero también una ventaja competitiva”.
Además, aseguró que si bien fueron "las empresas transnacionales las primeras en comprender que en un mundo globalizado, caracterizado por relaciones laborales cada vez más horizontales y sustentadas en la capacidad de innovación, el respeto y fomento de la diversidad no sólo es una decisión ética, sino que puede constituirse en una ventaja competitiva, las empresas nacionales están comprendiendo que el respeto a la diversidad es un factor que genera prácticas productivas más colaborativas, un mejor clima laboral y un entorno propicio para la innovación."
Posteriormente, Mal Green, Ministro Consejero de la Embajada Británica en Chile, subrayó que si bien hace poco más de una década se aprobó la ley de no discriminación en Reino Unido, "el interés previo a la normativa por parte de las compañías británicas por generar climas laborales inclusivos y equitativos, radicó en elevar los estándares con el objetivo de competir y captar los mejores talentos, independiente de la orientación sexual e identidad de género".