Guy Ryder, Director General de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y Paul Broadbent, Director Ejecutivo del Organismo de Autorización de Intermediarios del Reino Unido, firmaron el acuerdo en presencia de representantes del Ministerio del Interior, la Confederación de la Industria Británica y el Congreso de Sindicatos Británicos.

Durante los últimos años, la OIT y la GLA han colaborado estrechamente para luchar contra las prácticas de contratación abusiva y fraudulenta, el trabajo forzoso y la trata de personas.

En el marco de la Iniciativa sobre la contratación equitativa  dirigida por la OIT y respaldada por la Confederación Sindical Internacional y la Organización Internacional de Empleadores, en septiembre 2016 fueron presentados los nuevos “Principios y directrices operativas para la contratación equitativa ,” que fueron ampliamente reconocidos como un punto de referencia internacional sobre cómo abordar esta cuestión.

“Combatir las prácticas de contratación abusivas es fundamental para prevenir eficazmente la esclavitud moderna y el trabajo forzoso a nivel nacional e internacional. La labor de la GLA ha cambiado la manera de poner en práctica la reglamentación y la supervisión de los contratistas del trabajo en el Reino Unido. Este es un modelo que puede inspirar a otros gobiernos a implementar los Principios y directrices operativas para la contratación equitativa,” señaló Guy Ryder.

Tras la adopción de la Ley de inmigración del RU de 2016 , se otorgaron nuevas facultades a la GLA, que incluyen la posibilidad de investigar los delitos de esclavitud moderna relacionados con la explotación laboral. La GLA podrá investigar en todo el mercado laboral del RU, y no sólo en el sector de los productos frescos y los relacionados de procesamiento y embalaje, como antes.

“Estos poderes más amplios nos ayudarán a alcanzar nuestro objetivo de proteger de la explotación a los trabajadores vulnerables en el Reino Unido,” dijo Paul Broadbent. “El fortalecimiento de nuestra colaboración con la OIT nos ofrece la oportunidad de compartir la experiencia que hemos acumulado y de contribuir con los programas y herramientas de formación a fin de incrementar la denuncia e identificación del trabajo forzoso y de las prácticas de trabajo abusivas a lo largo de las cadenas de suministro.”

La cooperación entre la GLA y la OIT también contribuirá a concientizar sobre las disposiciones de transparencia de la Ley sobre la esclavitud moderna, las cuales requieren que las empresas garanticen que en ninguna de sus cadenas de suministro tenga lugar la trata de seres humanos. El Protocolo relativo al Convenio sobre el trabajo forzoso de la OIT  promueve además la debida diligencia del sector público y privado a fin de prevenir y responder a los riesgos del trabajo forzoso.

“El hecho es que en el mundo actual, todavía hay niños, mujeres y hombres víctimas de la esclavitud moderna, es una afrenta para todas las personas, las naciones del planeta. Todos tenemos un papel que desempeñar a fin de eliminarla de una vez por todas. Los interlocutores sociales son una pieza central de la ecuación, junto a otros socios valiosos como la GLA,” concluyó Guy Ryder.