Ya no alcanza con vestirse a la moda. La tendencia que cada vez suma más adeptos en Europa y Estados Unidos, y que de a poco llega a la Argentina, es vestirse a conciencia, es decir no sólo elegir qué ponerse sino comprar ropa que en todo su proceso de confección no afecte el medio ambiente, sea sustentable y que esté elaborada con trabajo justo. Se la conoce como moda ética o consumo responsable y se trata de prendas hechas con materiales naturales -algodón orgánico, bambú o lana orgánica-, materiales reciclados o reutilizados, o que rescatan tejidos tradicionales. Además son realizadas por diseñadores, marcas o productores comprometidos con usar energía renovable, generar menos desperdicios y usar menos químicos.