LEGO presenta su nuevo Centro de Materiales Sostenibles que contratará a 100 empleados para encontrar e implementar alternativas sostenibles a los materiales actuales.

La campaña “Lego: Stop playing with the Arctic”, enmarcada en la acción “Salvá el Ártico” de Greenpeace, fue desarrollada por la consultora RAPP Argentina e implementada en 28 países. Tras superar el objetivo de reunir más de un millón de firmas en la convocatoria online, la compañía de juguetes LEGO decidió dar un paso atrás en su cobranding con la petrolera Shell.

A través de una carta firmada por Jørgen Vig Knudstorp, Presidente y Consejero Delegado del Grupo LEGO, la empresa anunció que no va a renovar el contrato promocional con la petrolera Shell. “Nosotros no queremos ser parte de la campaña de Greenpeace y no vamos a hacer más comentarios”, dice el texto en referencia a la campaña de la organización ambientalista 

Greenpeace inció una campaña para exigir a LEGO que rompa su alianza con la petrolera Shell. LEGO y Shell tienen un acuerdo para que la imagen que representa a su marca estuviera en muchas sets de juguetes de gasolineras y automóviles de Ferrari, a manera de regalo promocional. Para la ONG se trata de una acción de relaciones públicas dirigida al público infantil para desviar la atención de las críticas por sus operaciones en el Ártico.

La empresas de entretenimiento LEGO posee una novedosa línea llamada “SERIOUS PLAY”  que es una herramienta de gestión estratégica para poder  generar decisiones de gestión basadas en una construcción colectiva que involucre a todos los miembros de un equipo, a partir del juego . En una entrevista con ComunicaRSE, Patricia Kistenmacher, una de las pocas profesionales que aplica la técnica en Argentina,  contó cómo surgió esta idea de usar los juguetes LEGO para la toma de decisiones de gestión y cómo se llegó a convertir en una herramienta innovadora de facilitación y diálogo para las empresas.