Esta es una de las grandes preguntas de la campaña de pesca sostenible. Desde hace siete años venimos apoyando a la pesca más selectiva, que se preocupa por el mar y que es el motor de muchas comunidades costeras. Les apoyamos para que tengan más voz en los foros políticos, para que quienes distribuyen el pescado pongan en valor este producto. Pero… ¿sabemos si quienes compran luego el pescado, los consumidores, están interesados en un producto más sostenible?